El Sucesor de Pedro, que en los últimos años ha advertido proféticamente de la Tercera Guerra Mundial ya en marcha, sigue los pasos de sus predecesores y se sitúa junto a los inocentes, combatiendo el mal con el bien.
En el Ángelus del domingo 13 de marzo, en el noveno aniversario de su elección como Obispo de Roma, Francisco pronunció palabras inequívocas sobre la “bárbara matanza de niños, de inocentes” que se está produciendo, pidiendo que se detenga la “masacre” y se ponga fin a lo que llamó la “inaceptable agresión armada” contra Ucrania. El Papa también recordó que quien apoya la violencia justificándola por motivos religiosos, “profana el nombre” de Dios, que es “el único Dios de la paz”.